CategoríasEl mercado de exhibición cinematográfica en Brasil vive un momento de efervescencia, con una creciente cantidad de estrenos nacionales que se caracterizan por su diversidad.
El pasado 19 de julio, la comedia blockbuster “O concurso”, de Pedro Vasconcelos, fue lanzada en salas comerciales y rápidamente se volvió uno de los títulos más taquilleros de la cartelera de este 2013.
Sólo en su primer fin de semana, ocupando 355 salas en todo el país, la película sobre cuatro jueces que pelean por un puesto de trabajo en el juzgado federal recaudó 3,7 millones de reales (cerca de 1,9 millones de dólares). Se trata de una producción de Filmeland distribuida por Downtown y Paris Filmes.
Otra película lanzada con distribución propia en la misma fecha, pero de factura mucho más artesanal, es el documental “Kátia”, de Karla Holanda. Se trata de un proyecto personal, en el que la directora convivió 20 días con Kátia Tapety, el primer travesti elegido para un cargo público en Brasil. Producida por Em Foco Multimídia, la obra ocupa una sala en Río de Janeiro con proyección digital, después de estrenar en São Paulo el 30 de mayo. Ha conquistado importantes reconocimientos del público en eventos como el Festival Internacional de Cine de Curitiba.
El próximo viernes, 2 de agosto, una película de estructura intermediaria amplía su presencia en salas comerciales. “Chamada a cobrar”, tercer largometraje de la directora Anna Muylaert (“Durval Discos”, “É proibido fumar”) llega a Río de Janeiro y Brasilia después de estrenarse comercialmente en São Paulo y de circular este año por festivales como Miami International Film Festival y el Festival de Cinema Latino-Americano de São Paulo.
Adaptación al cine de un telefilm realizado para TV Cultura, es la historia de una víctima de un falso secuestro que viaja de São Paulo a Río de Janeiro, siguiendo por teléfono las orientaciones del supuesto secuestrador de su hija. La distribución es de Gullane Entretenimento, también responsable de la producción con África Filmes.
CM
