Berlinale 2015: El cine latinoamericano cierra un año de participación histórica con importantes premios

Festivales - Europa

En una ceremonia celebrada el sábado 14 de febrero en el Berlinale Palast se dieron a conocer los principales premios del 65º Festival de Berlín. El cine latinoamericano cosechó varios galardones en una edición con presencia regional récord, con más de cincuenta obras repartidas en todas las categorías.

El jurado internacional otorgó tres Osos de Plata a títulos latinos. La cinematografía chilena fue doblemente reconocida con dos cintas que ahondan en el pasado del país: “El club” de Pablo Larraín recibió el Gran Premio del Jurado y “El botón de Nácar” del documentalista Patricio Guzmán ganó el galardón a Mejor Guión.

Por su parte, el guatemalteco Jayro Bustamante recogió el Oso de Plata Premio Alfred Bauer por su ópera prima “Ixcanul”, por tratarse de una película que “abre nuevas perspectivas”. Bustamante se basó en una historia real para realizar su primer largometraje, que aborda la problemática del tráfico de niños en su país en la figura de una mujer cakchiquel que es víctima del robo de su recién nacido. En declaraciones a LatAm cinema, Bustamante reconocía que lo que le movió a hacer esta película fue la impotencia de la mujer protagonista en la realidad, quien le autorizó a contarlo por ser una circunstancia común a muchas mujeres de la zona.

El mexicano Gabriel Ripstein consiguió el Premio a Mejor Ópera Prima con su “600 millas”, cinta que relata el tráfico de armas en la frontera mexicano-estadounidense. El incentivo es ofrecido por la asociación alemana de protección de derechos audiovisuales GWFF y consiste en 50.000 euros a repartir entre el director y el productor.

En cuanto a los incentivos independientes, el documentalista chileno hizo doblete con el principal Premio del Jurado Ecuménico. La brasileña “A que horas ela volta?” de Anna Muylaert, fue reconocida por el público como Mejor Película de la serie Panorama y con el CICAE Art Cinema Award. Muylaert relata en su cuarto largometraje la cotidianeidad de las relaciones preestablecidas entre empleados y patrones en una casa a través de dos generaciones de mujeres.

El cine latinoamericano fue el preferido de los premios Teddy, alzándose con tres de los cuatro reconocimientos. “Nasty Baby”, del chileno Sebastián Silva consiguió el Osito a Mejor Largometraje; “El hombre nuevo” del uruguayo Aldo Garay ganó como Mejor Documental/Ensayo y el chileno “San Cristóbal”, de Omar Zuñiga fue reconocido como Mejor Cortometraje.

Estos galardones se suman a los estímulos obtenidos en el European Co-Production Market. La chilena Marcela Said consiguió el incentivo de ARTE dotado con 6.000 euros para su próximo proyecto, “Los perros”; mientras que el director panameño Abner Benaim y la productora argentina Gema Juárez fueron reconocidos con el VFF Talent Highlight Pitch Award, dotado con 10.000 euros para su proyecto “Biencuidao”.

Desde Berlin, por Marta García.