El francés Philippe Tasca-Roochvarg lleva quince años trabajando con el cine latinoamericano; una larga relación que se refleja en el line up que su agencia de ventas Outplay promociona en este Marché du Film. Cuatro nuevas producciones LGBT de Latinoamérica se promueven en el mercado de Cannes, reflejando la diversidad de la región.
De reciente estreno mundial en la competencia argentina de BAFICI, “Taekwondo” tiene su market premiere en Cannes. Dirigida por el reconocido Marco Berger (“Plan B”, “Ausente”) y Martín Farina (“Fulboy”), esta comedia sobre un grupo de amigos que pasan unos días en una casa en las afueras de la ciudad, explora la intimidad de este micromundo masculino de cuerpos desnudos, homoerotismo y deseos escondidos.
También de Argentina es el drama “Esteros”, debut de Papu Curotto. Esta es la historia de dos amigos de la infancia que se reencuentran, dando lugar al resurgimiento de sentimientos que fueron sosegados.
Las otras dos novedades del catálogo provienen de Brasil. El documental “Waiting for B”, de Paulo Cesar Toledo y Abigail Spindel, que narra la historia de un grupo de personas que acamparon durante dos meses frente a un estadio de Sao Paulo para ver a Beyoncé, y “O ninho” (The Nest), serie dirigida por Filipe Matzembacher y Marcio Reolon (“Beira-mar”), sobre un joven que deja el ejército para buscar a su hermano, encontrando un nuevo espacio para explorar su sexualidad.
“Tengo predilección por las películas latinoamericanas”, asegura Tasca, quien a través de los años ha descubierto nuevos talentos de la región y vivenciado el crecimiento del cine LGBT latinoamericano. “Se puede percibir diferencias entre las cinematografías de Latinoamérica y la forma en que muestran a los personajes y narran las historias”, observa, puesto a comparar el modo en que los cineastas de los diferentes países abordan la temática conforme a su cultura y los derechos alcanzados en cada país por la comunidad LGBT.
“La gente va ganando derechos y las cosas van cambiando. Podría decir que en Argentina es un poco más atrevido. En Chile es más conservador pero eso está cambiando. En Brasil hay una fuerte influencia religiosa, por eso es que los directores siempre intentan explicar al público que es difícil la aceptación. Hay otros países emergentes como Colombia y Perú. Es interesante seguir este proceso y llevarlo a las audiencias en Europa y Estados Unidos, que son los mercados donde mayor aceptación tienen”, comenta.
Outplay es además distribuidor en Francia, donde acaba de estrenar la coproducción chileno-argentina “La visita”, de Mauricio López Fernández.