Dos formas de representar la marginalidad en los estrenos chilenos de agosto

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Agosto en Chile arrancó con el estreno del documental “Guerrero” de Sebastián Moreno. Luego siguieron un par de semanas sin lanzamientos de títulos nacionales, pero el octavo mes del año se despide con dos nuevas películas chilenas en cartel.

El pasado jueves 24 se estrenó con distribución independiente en salas de todo el país “Cabros de mierda”, filme escrito y dirigido por el reconocido Gonzalo Justiniano que llega cinco años después de su anterior largometraje, “¿Alguien ha visto a Lupita?”. La película, producida por Sahara Films en asociación con Libélula Post, Artemedios Group y HD Argentina, está ambientada durante la dictadura de Pinochet y se centra en la vida de una joven (Nathalia Aragonese) que vive con su madre y su hija en un barrio marginal. Un día llega Samuel, un joven misionero que registrará con su cámara ese entorno, reconstruyendo así una época de  protesta, miseria y resistencia.

Siguiendo con los estratos vulnerados de la sociedad, pero cambiando el tono de reconstrucción histórica casi documental por uno de acción, explosiones y autos a gran velocidad, el próximo jueves 31 de agosto llega “Johnny 100 pesos, capítulo 2”. Distribuida por BF, se trata de la secuela del filme homónimo de 1993 dirigida por Gustavo Graef Marino y producida por Passport Films y Filmosonido de Chile y Bandera Brothers Entertainment de Estados Unidos. Aquí veremos a Johnny (Armando Araiza) salir en libertad luego de haber cumplido una condena de veinte años e intentar readaptarse a las reglas del juego. Johnny deberá evitar que su pasado lo persiga y a la vez lograr que su hijo no repita su destino, y ambos deberán sortear numerosos obstáculos para poder sobrevivir.