El BIFF celebra su quinta edición apostando por una programación joven

Festivales - Colombia

Del 10 al 16 de octubre se celebra la quinta edición del Bogota International Film Festival (BIFF), cuya programación de cine, formación y espacios de encuentro entre profesionales sigue siendo una apuesta por consolidar un festival de calidad y reconocimiento internacional en la capital colombiana.

“Nosotros tenemos una serie de objetivos propuestos”, explica Andrés Bayona, director del BIFF, en diálogo con LatAm Cinema. “El primero, y quizás el más importante, es una programación que incluya títulos arriesgados; a nosotros nos encanta estar buscando esa línea de acción programática pensando sobre todo en nuestro público. Bogotá es una ciudad tremendamente joven, y toda nuestra forma de pensar y las secciones y los títulos a programar están pensados justamente para ese público joven”.

Quizás la novedad más relevante de la programación es la creación de dos secciones: Identidades y Tonos de thriller, cuyo contenido nutrirá una selección oficial que cuenta con notables títulos internacionales. Con las dos nuevas secciones, el 5° BIFF propone un total de 10 secciones, entre las que se encuentran distribuidas 61 obras de distintas partes del mundo, las cuales serán exhibidas en 12 salas.

En Identidades se encuentran películas que problematizan la identidad, ya sea grupal o individual, como es el caso de “Divino amor”, lo más reciente del brasileño Gabriel Mascaro (Brasil/ Uruguay/ Chile/ Dinamarca/ Noruega/ Suecia). Tonos de thriller busca dar una muestra de diversas exploraciones del género; entre su selección se destaca “Bacurau”, de Kleber Mendoça y Juliano Dornelles (Brasil/Francia), que será también la película de apertura del 5° BIFF. La sección Fantasmas del pasado agrupa películas en las que el pasado es objeto de cuestionamiento y de exploración. Allí se podrá ver entre las “Fausto”, de Andrea Bussmann (México/Canadá).

Espíritu joven, la sección más grande del festival, busca reunir obras arriesgadas y desafiantes que expresen inquietudes de nuevas generaciones de directores. Entre la selección se encuentran “Esto no es Berlín” de Hari Sama (Mexico); “La arrancada” de Aldemar Matías (Cuba/Francia); “Miembros de la familia” de Mateo Bendesky (Argentina), quien es además uno de los invitados del festival; y “Los tiburones” de Lucía Garibaldi (Uruguay/Argentina/España). Por su parte, Colombia viva es una pequeña sección que reúne tres películas producidas en los últimos cinco años: “Fait vivir”, lo más reciente de Óscar Ruíz Navia; “La forma del presente”, documental colombo-noruego de Manuel Correa; y “Siembra”, de Santiago Lozano y Angélica Osorio.

“Pensando en el público joven, no tiene sentido que seamos —ni por ahora pretendemos ser— un festival competitivo. Por eso tenemos esa programación y «empaquetamos», en términos de comunicación, las secciones de acuerdo con lo que esperaríamos que los jóvenes quisieran encontrar en cada una. Si uno hace una lectura un poco más inteligente de la programación se dará cuenta de que transversalmente están metidos todos los temas: están las películas religiosas, está la mujer, está lo LGBT; sin necesidad de comunicarlo de esa manera. Nos gusta que las películas se definan en esa curaduría transversal que se complementa constantemente con una lectura horizontal con el resto de la sección oficial”, precisó Bayona respecto de la manera en que se concibe la programación en el festival.

Asimismo, la sección BIFF Kids exhibirá el documental puertorriqueño “Los niños de María”, codirigido por Carlos Larriu y Alfredo Castellanos. “Estamos trabajando mucho con niños. Este año estamos metiendo más de 4 mil niños de los colegios públicos al cine”, señaló Bayona.

La retrospectiva de este año está dedicada a la productora alemana Autentika Films, frecuente coproductora de filmes latinoamericanos. La sección presenta “Breve historia del planeta verde” de Santiago Loza; “Ejercicios de memoria” de Paz Encina; “Girimunho” de Helvécio Marins Jr. Y Clarissa Campolina; “O Proceso” de María Augusta Ramos; “Paraíso” de Héctor Gálvez; “Polvo” de Julio Hernández Cordón; la ya mencionada “Siembra”y “Post Mortem” de Pablo Larraín. Gudula Meinzolt (Alemania) y Paulo de Carvalho (Brasil), fundadores de Autentika Films, será invitados especiales para esta edición del festival.

Adicionalmente, el BIFF tendrá una nueva versión del Foro de industria, un espacio pensado para la interacción de profesionales locales con expertos internacional y para el desarrollo de contenido locales bajo la guía de estos mismos expertos. Por ello, el foro tendrá diversas actividades como charlas, debates, asesorías y sesiones de pitching; con invitados como Silvia Iturbe (Double i, España) y Jaime Osorio (“Siete cabezas”). Este foro también responde a otro de los objetivos del festival, que tiene que ver con el networking y el crecimiento de la industria.

En paralelo, el BIFF realizará nuevamente BIFF Bang!, su sección de formación, en la que habrá talleres de guion, producción, narración para realidad virtual y crítica cinematográfica. Esta sección tiene que ver con el otro de los desafíos del festival: “Nuestro segundo objetivo es descubrir los talentos, cuáles son los futuros profesionales que la industria está necesitando y que la academia no está formando”, sostiene Bayona.