Los representantes de las 25 películas y proyectos argentinos presentes en el Festival de San Sebastián, en su mayoría partícipes de la Asamblea Audiovisual Abierta y nucleados en la consigna Cine Argentino Unido, se reunieron el domingo 24 de septiembre en las inmediaciones del Kursaal para expresar “la profunda preocupación por los dichos del candidato presidencial de un partido de ultraderecha que amenaza con el cierre del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), y con el cierre del Ministerio de la Cultura, del Ministerio de Educación, del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas, y del Ministerio de Salud, entre otras instituciones estatales”.
“La industria cultural audiovisual argentina se demuestra creativa y resiliente a pesar de un contexto económico adverso y se destaca como impulsora de la economía, generando trabajo directo e indirecto en una enorme cantidad de servicios asociados, con un crecimiento sostenido del empleo del 45% en los últimos 15 años. El impacto económico de la industria audiovisual es de un 5,2% del total de la economía argentina, sumando los efectos directos e indirectos sobre otros sectores, según datos del Observatorio Audiovisual INCAA de abril de 2022”, explicaron en una nota de prensa.
En la declaración pública, a la que se han adherido cerca de 600 profesionales, los promotores explican que “el camino debe ser mejorar, fortalecer y volver más eficientes las políticas de fomento y no desactivar la existencia de una industria pujante y consolidada. Los países que desarrollaron una industria audiovisual lo han hecho gracias a la continuidad de las políticas industriales y culturales”.
El director del Festival de San Sebastián, José Luis Rebordinos, participó en el acto destacando la participación récord del cine argentino en la presente edición del certamen, con 25 producciones entre proyectos, work in progress y películas terminadas.