Carlos Antón, Director del Programa Tareula

Tras iniciar sus actividades en 2009, Tareula sigue continúa su expansión en 2010 con el objetivo de fomentar la cooperación cinematográfica entre Europa y Latinoamérica. Este programa, que ha demostrado ser un excelente aliado para productores iberoamericanos interesados en impulsar sus proyectos a nivel internacional, ofrecerá una serie de seminarios técnicos de capacitación que se impartirán, en su segunda edición, en cuatro centros regionales: Buenos Aires, Bogotá, México DF y San Sebastián. Organizado por EGEDA (Entidad de Gestión de Derechos de los Productores Audiovisuales), en colaboración con Latin American Training Center y la Fundación para la Investigación del Audiovisual, el programa se apoya en la experiencia de sus conferenciantes y tutores (en la pasada edición han participado prestigiosos productores de la talla de Gerardo Herrero, Juan Gordon y Manuel Cristóbal) así como en la experiencia y contactos internacionales de sus organizadores.

¿Cuál ha sido el balance de la primera edición del programa?

El balance fue muy positivo. Los participantes quedaron gratamente impresionados por el tipo de formación recibida y sobre todo por haber tenido contacto con profesionales Senior del mundo de la producción audiovisual. El año pasado alumnos del programa fueron tutorizados por productores como Gerardo Herrero, que acaba de ganar un Oscar como productor de “El secreto de sus ojos”, o como Juan Gordon, que ganó el Goya a la mejor película por “Celda 211”, y eso ha sido muy valorado por parte de los participantes. A raíz de eso, este año hemos decidido potenciar la parte consultiva del curso y cada uno de los guiones y proyectos seleccionados va a ser analizado por un script editor profesional. Luego, cada participante va a tener como tutor a un guionista y a un productor profesional, que lo van a acompañar en el proceso de desarrollo de los proyectos durante tres meses.

El curso parece priorizar el lado industrial ante el artístico.

El objetivo del curso, que a priori puede parecer de formación, es de negocio y queremos llevar al Festival de San Sebastián los 20 mejores proyectos que hay en este momento. El curso tiene un planteamiento industrial y busca que los proyectos se puedan realizar y que las películas sean rentables tanto a nivel nacional como internacional. A los proyectos que vayan a San Sebastián le vamos a hacer un informe de posicionamiento de mercado por un experto en marketing para ayudar a que cada proyecto pueda definir los países objetivo a nivel de mercado y coproducción, los mejores planteamientos de marketing, de distribución, etc.

Tareula también busca estrechar los lazos entre Europa y Latinoamérica

Al ser un curso patrocinado por el programa MEDIA International se busca la cooperación entre Europa y otros países, en este caso los del continente latinoamericano. Por tanto, dentro de este programa formativo hay un punto de unión que va a ser el Festival de San Sebastián. Allí queremos que vayan diez productores latinoamericanos y diez europeos que se puedan conocer, hacer benchmarking y posibles acuerdos de coproducción. El objetivo final es ese: lograr hacer negocio de coproducción porque a través de la coproducción hecha con un corte internacional lo que estás ampliando es el territorio de distribución que es el objetivo. También queremos que España sea la puerta de entrada a Europa para el cine latinoamericano, que sirva a modo de hub para estrechar los lazos entre los productores de ambos contintes.

La distribución parece seguir siendo el gran cuello de botella para el cine iberoamericano.

Sin duda alguna. Es verdad que el acceso a los circuitos de distribución no es fácil porque, hasta cierto punto están copados por las grandes distribuidoras norteamericanas. Pero, también es cierto que cuando una película funciona no tiene ningún problema para ser distribuida. Hay que mirar al distribuidor como alguien que entiende su negocio, que busca que las salas estén llenas y que nunca va a despreciar un producto que le pueda facilitar que eso se cumpla. Lo que no se puede pensar es que una película de menor impacto comercial se vaya a estrenar en España en 500 pantallas.

¿Cómo cree que evolucionará el programa Tareula en los próximos años?

Nuestro deseo y objetivo es que Tareula se convierta en un centro de networking donde haya personas y profesionales de ambos continentes que se conozcan entre sí. Queremos que las personas que se han formado en el programa estén conectados a una red que, evidentemente, cada año irá creciendo de tal manera que cuando un productor francés o noruego esté buscando a un coproductor latinoamericano, lo primero que haga sea entrar en nuestra base de datos. Esto le permitirá tener acceso a información de compañeros que han participado en el programa y, por tanto, profesionales que manejan los mismos conceptos de producción y de negocios y que, en definitiva, hablan el mismo idioma. Aparte de eso, nos gustaría ofrecer una formación permanente que sirva para que todos nuestros antiguos alumnos se mantengan actualizados.

A partir de la experiencia del año pasado, ¿cuáles cree que son los proyectos latinoamericanos que despiertan mayor interés en España?

Eso es algo difícil de decir porque para contestar esta pregunta habría que ponerse, más que en el pellejo de un productor, en el pellejo del público. Creo que el desafío es despertar el interés del público sin renunciar a lo que ha sido nuestro cine. Podemos contar nuestras historias, pero para ello hay que utilizar las herramientas que el cine comercial, el cine de masas pone a tu alcance. Es decir, hay que convertir una historia nuestra en una historia que quiera ver mucha gente porque también es una forma de difundir nuestra cultura. Ese es quizás el objetivo del curso: hacer nuestro cine accesible a todo el mundo como medio de mostrar nuestra cultura. En esto hay claros ejemplos, como el de “El secreto de sus ojos”, que es una película y una historia bien nuestra pero que tiene una realización perfectamente internacional y, por tanto, puede ser vendida en todo el mundo.