CategoríasDesde este lunes 9 y hasta el 15 de octubre, la capital de la Región de los Ríos celebra la vigésimo cuarta edición de su certamen de cine, el Festival Internacional de Cine de Valdivia. Nuevos nombres y directores reconocidos integran una selección que invita a recorrer la línea de tiempo cinematográfica chilena. Con cuatro categorías competitivas –Largo Internacional, Largo Chileno, Corto Latinoamericano y Corto Latinoamericano Infantil- y una amplia oferta de muestras, la diversa y prolífica producción nacional es la gran protagonista de la programación.
En la Competencia Internacional, el cine chileno reciente dice presente con dos esperados estrenos: el debut en solitario de Camila José Donoso, “Casa Roshell”, una coproducción con México que tuvo su lanzamiento mundial en la última Berlinale; y el segundo trabajo de Niles Atallah, “Rey”, una producción de la santiaguina Diluvio con Francia, Holanda, Alemania y Qatar. La selección se completa con otra decena de obras internacionales, entre las que se incluyen dos de la región: “Baronesa” de la brasileña Juliana Antunes y “Cocote” del dominicano Nelson Carlo de los Santos Arias.
Con mayoría de directoras mujeres, en la Competencia Chilena se presentan siete largos de estreno en Chile, cuatro de los cuales tendrán su premiere mundial: los documentales “La directiva” de Lorena Giachino y “Desierto no cierto” de Nathaly Cano y las ficciones “La isla de los pingüinos” de Guillermo Söhrens y “One color self-portrait” de Vicente de Solminihac. Completan la selección la recientemente premiada en San Sebastián y Biarritz “Los perros” de Marcela Said; “Princesita” de Marialy Rivas; y el documental “Tierra sola” de Tiziana Panizza.
El cine nacional contemporáneo también protagoniza la muestra Ventana de Cine Chileno, en la que se repondrán los estrenos del año. Allí se verán, entonces, la premiere mundial de “Exote: la filmación de la telenovela errante” de Pablo Martínez, un registro documental de rodaje del film de apertura; y las ya comercializadas “Vida de familia” de Alicia Scherson y Cristián Jiménez; “La mentirita blanca” de Tomás Alzamora; “Cabros de mierda” de Gonzalo Justiniano y “Tacos de cemento” de Marcelo Porta. También integra la sección el corto “Secos” de Galut Alarcón y Chamila Rodríguez.
Abriendo paso al cine venidero, el certamen organiza en alianza con CinemaChile y Film Commission Chile la primera edición de Cine Chileno del Futuro, un work in progress que presenta una nueva generación de seis filmes nacionales: “Nona. Si me mojan, yo los quemo” de Camila José Donoso; “El hombre del futuro” de Felipe Ríos; “Dry Martina” de Che Sandoval; “Friendship”, de Peter McPhee; “Todo puede ser” de Gonzalo Mazza y “No hace falta pedir disculpas” de Moisés Sepúlveda. Los trabajos serán mostrados a profesionales internacionales del área de la circulación y optarán al Premio que otorga CinemaChile consistente en una beca para participar en el Rotterdam Lab 2018.
En declaraciones a LatAm cinema, Raúl Camargo, director del certamen, subraya el momento “expectante” que atraviesa el cine nacional. “El inicio del nuevo siglo trajo para el cine chileno una consolidación de lo que se había producido de manera intermitente en los años anteriores, potenciándose como invitado habitual de los festivales de cine de mayor prestigio del mundo”, apunta, y hace referencia al golpe militar de 1973 como punto de quiebre del “camino de la modernidad cinematográfica iniciada por Raúl Ruiz, Aldo Francia, Helvio Soto y Miguel Littin, los baluartes del nuevo cine chileno”.
En FICValdivia también hay espacio para la producción del pasado. Justamente, “La telenovela errante”, la obra de Ruiz de 1990 que ha sido recuperada recientemente bajo la dirección de su viuda Valeria Sarmiento (Poetastros), será la encargada de inaugurar la edición 2017 del certamen; y entre los homenajes se proponen tributos al Colectivo del Cabo Astica, el actor Claudio Arrau y el cantautor Víctor Jara. “Es en la diversidad que estriba nuestro valor, y la manera de proyectarnos está en reconocernos, primero valorando a nuestros autores de mayor trayectoria, y luego posibilitando el encuentro de la comunidad cinematográfica y de ella con el público, pero sin menospreciar al espectador sino dándoles las más variadas alternativas cinematográficas. Contribuir a ello y potenciar a FICValdivia como ese espacio de encuentro, diálogo e integración es nuestro compromiso”, señala Camargo.
