CategoríasEl programa vasco de residencias y desarrollo de proyectos audiovisuales Ikusmira Berriak (Nuevas Miradas en euskera) abrió su octava convocatoria, que a partir de esta edición ampliará de cinco a seis el número de plazas. El llamado, abierto hasta el 1 de setiembre, es para cineastas con proyectos de todo el mundo así como para quienes hayan participado en la sección Nest del Festival de San Sebastián y el alumnado de EQZE.
Organizado por el Festival de San Sebastián, el Centro de Cultura Contemporánea Tabakalera y la Elías Querejeta Zine Eskola (EQZE), la residencia tiene una duración de ocho semanas distribuidas en dos periodos: seis semanas entre marzo y abril de 2022, en las que los participantes pondrán su proyecto en marcha en el centro Tabakalera de San Sebastián, y dos más durante la celebración del Festival, al que los directores acudirán con el proyecto ya más desarrollado para mostrarlo ante los representantes de la industria cinematográfica. Entre mayo y septiembre, mientras continúan trabajando en sus proyecto, cada cineasta recibirá tutorización online por parte de un comité de expertos formado por profesionales de la industria, según informa la organización del programa.
Cada proyecto cuenta con una ayuda al desarrollo de 5.000 euros a entregarse en junio, para que los cineastas puedan seguir trabajando entre las dos estancias de la residencia. Finalmente, la productora Irusoin otorgará el Premio Irusoin a la Postproducción a uno de los proyectos seleccionados, que recibirá servicios de postproducción de sonido, color y grafismo, así como un máster DCP.
La inscripción se debe realizar online y las personas interesadas tendrán que presentar un dossier compuesto por sinopsis, tratamiento, carta de intenciones y biofilmografía, según se detalla en el reglamento.
Dos realizadores latinoamericanos, ambos de Argentina, fueron seleccionados para la séptima edición de Ikusmira Berriak que comenzó el pasado mes de marzo: el director, guionista y director de fotografía Eduardo Crespo con el proyecto “La gruta del viento”, y la directora Magdalena Orellana con el proyecto “Hasta que el lugar se haga improbable”.
