El cine latinoamericano vuelve con fuerza a La Fabrique cinéma, el programa de apoyo a la coproducción para directores de “los países del sur y emergentes” que celebrará su próxima edición en el marco del 74º Festival de Cannes, con cuatro proyectos seleccionados de la región.
Organizado por el Institut Français, con el apoyo del Festival de Cannes y el Marché du Film, esta iniciativa selecciona anualmente diez proyectos en desarrollo (primeras o segundas obras) de realizadores de África, Asia, América Latina, Europa Central y del Este, de Próximo y Medio Oriente. Con la cineasta francesa de origen libanés Danielle Arbid como madrina del programa, la decimotercera edición incluye proyectos provenientes de Argentina, Colombia, Costa Rica y Cuba.
“Los caídos” del cubano Damián Sainz Edwards es una de las tres óperas primas latinoamericanas incluidas en el programa. Con producción de la cubano-mexicana Autonauta Films (“Entre perro y lobo” de Irene Gutiérrez), el proyecto toma como punto de partida el cortometraje “Los cimarrones”, del mismo director, que fue estrenado en Cinélatino Rencontres de Toulouse. El filme tiene como protagonista a Orestes, que deberá luchar contra sus propios prejuicios luego de que su hija, a la que abandonó cuando ella se asumió como mujer trans, es encontrada muerta.
“La película muestra la masculinidad hegemónica en crisis, el macho que busca su salida del laberinto del machismo, lidiando con el peso emotivo de su propia violencia. Se trata de una película íntima, rodada en su mayor parte con cámara en mano y ambientada en Regla, un pueblo de la bahía de La Habana; un lugar lleno de misticismo, donde conviven los vivos y los muertos. También es el pueblo natal de Yemayá, una importante figura de la religión afrocubana”, explica el director en su declaración de intenciones.
El cine costarricense vuelve a estar presente en La Fabrique tras la participación de “Río Sucio” de Gustavo Fallas en 2016 y de “Agosto” en 2014 de Armando Capó Ramos. “Si no ardemos, cómo iluminar la noche”, debut en largo de la directora Kim Torres producido por la también tica Noche Negra Producciones, viaja a Cannes tras haber recibido el apoyo de Ibermedia y haber sido seleccionada en el MAFF de Málaga y el Torino Film Lab Next. Definido por su directora como “un pequeño pero rebelde acto para redimir nuestros cuerpos”, este drama se centra en Laura, una joven de 14 años que tiene que mudarse a un conservador pueblo de montaña donde se rumorea que una criatura del bosque mató a una mujer. “Me interesa explorar lo doloroso, hermoso, emocionante y peligroso que puede ser crecer. Esto se entrelazará con el cuento popular en el que una supuesta criatura mató a una mujer en el bosque. Aunque parezca surrealista, en la cultura latinoamericana es común tener estas creencias para evitar hablar de las duras verdades. Esta es una historia que habla de la cultura violenta y conservadora en Costa Rica, donde aún vivimos en un estado confesional”, explica la directora sobre este proyecto, que ya cuenta con la coproducción de la mexicana Cine Feral y la francesa Les Films du Clan.
La tercera ópera prima latinoamericana es la argentina “Hijo mayor”, con la que la directora Cecilia Kang presenta un relato generacional sobre el asentamiento de una familia coreana en Argentina. “Hace algunos años, entrevisté a mi padre en su cocina con mi cámara y le pedí que contara su historia desde el principio. Algo que me llamó la atención fue el hecho de que ya conocía las cosas que me estaba contando. Eran las mismas historias que había escuchado toda mi vida, repetidas una y otra vez. Una ficción mezclada con elementos de la realidad, de lo que uno imagina de ese espacio y tiempo reales, o de lo que uno decide recordar. 'Hijo mayor' nace de esos recuerdos; parcial y fuera del tiempo cronológico, delineado por la huella romántica de un hombre que decidió no elegir el camino que se le impuso para buscar uno diferente, y cómo el camino que ha tomado es ineludiblemente el inicio del mío”, comenta la directora acerca de este proyecto que será rodado en Argentina, Paraguay y Corea del Sur. La argentina Tarea Fina está a cargo de esta producción en la que participa la paraguaya Sabate Films.
El cuarto proyecto de la región proviene de Colombia y acaba de recibir el apoyo del IDFA Bertha Fund: “Alis” de la dupla de directores y productores Clare Weiskopf y Nicolás van Hemelryck (“Amazona”). Producida por la colombiana Casatarántula junto a la rumana deFilm, la chilena Pantalla Cines y la danesa Magic Hour Films, el film sigue a un grupo ocho chicas adolescentes que viven en un hogar de menores en Bogotá, pero que al crear una amiga ficticia, Alis, expresan su determinación a romper el ciclo de violencia en el que viven y abrazar el futuro.
“Descubrimos que nuestra imaginación dice más sobre nosotros mismos que nuestra biografía. Este es un filme sobre unas chicas a las que no se les pregunta qué quieren ser cuando sean grandes, porque se asume que lo que son hoy ya es una sentencia, pero mientras se escuchan a ellas mismas contando la historia de Alis, sucede algo íntimo que puede desbloquear la puerta hacia la transformación”, explican sus directores
Los participantes se beneficiarán de un programa intensivo que incluye reuniones individuales con productores franceses e internacionales, así como reuniones de grupo con profesionales, en colaboración con el Festival de Cannes y las selecciones paralelas del certamen. En su edición de 2020, celebrada online, el programa seleccionó dos proyectos de la región: “Babylon” del brasileño Chico Bahia y “Los sin nombres”, el debut en ficción de la venezolana Valeria Valentina Bolivar.