“Otra película de amor”, una historia de despertar sexual en los años 90

Luego de la película de culto “Empaná de pino”, Edwin Oyarce -más conocido como Wincy- estrena su nuevo y ultra independiente largometraje como director y guionista, “Otra película de amor”, historia del despertar sexual de un adolescente gay en los años 90.

Diego (Benjamín Prati) es un chico de clase media que vive con su peculiar madre (Beba Koenig-Robert). Un día de verano se reencuentra con Sebastián (Aquiles Poblete), un amigo de la infancia con el cual entabla una intensa amistad. Entre paseos, charlas, borracheras, drogas y rock & roll, Diego descubre su fascinación y deseo por Sebastián.

“Otra historia de amor” es esencialmente un drama romántico -donde sin embargo no falta el sello de autor del director con elementos bizarros a través de su galería de personajes secundarios-, que explora “el instante previo al sexo, la ansiedad, la tensión sexual”.

Tomando su propia adolescencia como espejo, ambienta la historia en los años 90, antes de que la tecnología modificara la forma de relacionarse.

“Lo que me interesa de esa época, además de que coincide con mi etapa de adolescencia, son todos estos elementos que no existían en las relaciones y que ahora se utilizan mucho, como las redes sociales, los teléfonos celulares…Creo que las relaciones han cambiado mucho desde que entraran en juego estas cosas. Como que antes el mundo de uno era más reducido. Ahora uno siente que forma parte. En la adolescencia uno pensaba: soy el único gay en el mundo. Ese tipo de cosas ya no existen. Ahora uno busca, googlea”, analiza Wincy.

Rechazando ser una película de nicho, la historia no se concentra en el tema homosexual: “La homosexualidad no se cuestiona, ni siquiera es cuestionada por la mamá. Me interesaba mostrar eso con naturalidad. Ahí va el título también: Otra película de amor”.

Producción autogestionada de Terrorismo visual, cuenta con la colaboración de la Escuela de Cine de Chile y Gitano Films, distribuidora que la estrena exclusivamente en el Centro Arte Alameda de Santiago de Chile desde el 27 de septiembre.

CGC