Bajo el nombre “Documental, dictadura y democracia”, se celebró en Paris una semana al documental chileno. La muestra ofreció al público parisino, del 20 al 27 de febrero, doce documentales en el que se “plasman las diferentes miradas que constituyen el cine documental chileno”, según declaró el documentalista chileno Patricio Guzmán, organizador de la muestra.
El documental “Actores secundarios”, de Pachi Bustos y Jorge Leiva fue el encargado de inaugurar la muestra en la que también se exhibieron “Ningún lugar en ninguna parte”, de José Luis Torres Leiva; “La mamá de mi abuela le contó a mi abuela”, de Ignacio Agüero; “Arcana”, de Cristóbal Vicente; y “Cofralandes o Rapsodia chilena”, de Raúl Ruiz.
En el programa Guzmán incluyó también una de sus propias obras, “El caso Pinochet”, película seleccionada en el Festival de Cannes en 2002. La programación se completó con “Opus Dei, una cruzada silenciosa”, de Marcela Said Cares y Jean de Certeau; “El corredor” de Cristián Leighton; “Perspecplejia” de David Albala; “El lado oscuro de la dama blanca” de Patricio Henríquez, y “María Félix”, de Carmen Castillo.