De los 15 proyectos documentales seleccionados en el 19º Lau Haizetara, tres tienen participación latinoamericana. Organizado por IBAIA (Asociación de Productoras Audiovisuales Independientes del País Vasco) en colaboración del certamen donostiarra, el Foro busca conectar los proyectos seleccionados con potenciales alianzas para su financiación e internacionalización. El evento se desarrollará del 25 al 27 de septiembre en el marco del 71º Festival de San Sebastián.
“Pulso” -un proyecto brasileño dirigido por Victoria Alvares y Quentin Delaroche, y producido por Revoada Produçoes- participa en el Foro en busca de coproducción, financiación, festivales, plataformas, canales y otras oportunidades para su distribución. Se trata de una road movie poética que sigue la campaña electoral de una militante del Movimiento de Trabajadores Sin Tierra en Pernambuco, Rosa Amori, finalmente elegida para representar al movimiento en las elecciones parlamentarias. Se trata del segundo largometraje conjunto de la dupla Alvares-Delaroche, que en 2018 estrenaron el documental “Bloqueo”.
Desde Brasil llega también “Si me muero”, largometraje documental de animación stop-motion en etapa de desarrollo dirigido por la navarra Esther Vital y producido por Ana Fernández Saiz. El proyecto al Foro en busca de alianzas de coproducción, especialmente con España, Brasil y Chile. Se trata del primer largometraje como directora de Vital, que recientemente estrenó “Cadê Heleny”, corto documental stop-motion sobre una mujer desaparecida en 1971 por la dictadura militar brasileña. En “Si me muero”, la directora continúa explorando la estética y el tema del corto para contar la historia de la “Casa de la Muerte”, uno de los centros de tortura más espeluznantes de la dictadura brasileña.
Por último, “Yo, terrateniente” es el nuevo trabajo dirigido por el cineasta argentino afincado en España Rodrigo Demirjian. Producido por la española Tourmalet Films en coproducción con la argentina Ah! Cine, el proyecto llega a San Sebastián en etapa de desarrollo y en busca de coproducción internacional; también buscará establecer diálogos con agencias de ventas, distribuidoras y festivales. Se trata de un proyecto autobiográfico en el que el director propone un retrato cercano y autoparódico de sí mismo y de su familia burguesa venida a menos. En palabras del propio Demirjian, el proyecto “esconde bajo una apariencia paródica, mi inevitable necesidad de saber la verdadera historia de las tierras familiares, adquiridas -o arrebatadas a los indígenas- en el siglo XIX, y que ahora heredo. Es esa necesidad la que me ha llevado a descubrir mi propia ignorancia sobre la historia de mi país natal, Argentina. Y, finalmente, a plantearme cuál debe ser el futuro ético para esas tierras”. El director estrenó el año pasado su ópera prima, “El legado”, producida por el mismo tándem Tourmalet-Ah! Cine.