Un centenar de profesionales se dieron cita el martes 24 de septiembre para apoyar al cine argentino en un acto internacional convocado por el Festival de San Sebastián con la participación de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Argentina. Realizada en las escaleras del Kursaal -sede principal del festival-, la concentración contó con la participación de profesionales de Argentina y otros países que en estos días presentan sus proyectos y películas en la edición del 72º del certamen vasco.
Durante el acto, el director José Luis Rebordinos expresó la solidaridad del festival donostiarra "con la industria cinematográfica argentina ante la situación excepcional que vive con la paralización de muchos de sus proyectos, el vaciado de contenido del INCAA, y con las medidas que este gobierno está tomando que ponen en peligro el desarrollo, no solo de su cinematografía, sino también de otras manifestaciones de su cultura”. Asimismo, Rebordinos destacó que “este apoyo no significa ninguna intromisión en la política de Argentina. Durante años hemos colaborado con un INCAA que ha tenido diferentes colores políticos perteneciendo a gobiernos conservadores y liberales o a otros de tipo peronista”. El manifiesto finaliza afirmando que el festival donostiarra “no puede permanecer al margen del desmantelamiento de una cinematografía nacional por parte de un gobierno que, además, justifica una dictadura militar que asesinó a miles de ciudadanos”.
Tras la lectura del manifiesto en euskera, español e inglés, la directora y dramaturga Lola Arias, la actriz y curadora Maricel Álvarez, y la cineasta María Alché fueron las voceras de un comunicado de profesionales de Argentina en el que denunciaron la gestión del actual gobierno ultraliberal “que intenta promocionar como libertad la destrucción de nuestra memoria y nuestra soberanía cultural”. En dicho manifiesto, las cineastas auguraron que posiblemente habrá muy pocas películas argentinas en la próxima edición del festival.
El apoyo del festival vasco al cine argentino también se expresa anualmente en la selección de proyectos y películas. En esta edición han sido 16 las películas argentinas programadas, mientras que el espacio de industria recibió nueve proyectos con participación argentina en el Foro de Coproducción Europa- América Latina, WIP Latam e Ikusmira Berriak. Precisamente, el acto en defensa del cine argentino se desarrolló justo después de la exhibición de la nueva película de Diego Lerman, “El hombre que amaba los platos voladores”, en la Sección Oficial y antes de la proyección del documental “Traslados” de Nicolás Gil Lavedra, presentado como función especial.
Después de la concentración, en el marco de un cóctel organizado por el festival, el certamen donostiarra y el Festival de Málaga anunciaron una iniciativa de promoción del cine español que consiste en la programación de seis películas españolas en la capital argentina entre el 27 de noviembre y el 1 de diciembre, y en la siguiente semana, en Uruguay, en el marco de Ventana Sur.